¿Qué es La Retinopatía Diabética?
Se puede explicar a la retina como una delgada membrana rica en vasos sanguíneos que tapizan la parte interna del ojo.
Es responsable de captar la luz y junto con el nervio óptico, enviar información al cerebro para que se produzca la imagen, o sea que es indispensable para la vista.
La retinopatía diabética ocurre como complicación de la Diabetes, afectando los vasos sanguíneos de la retina dejando escapar sustancias que en condiciones normales no lo haría, como ser líquido, grasas, etc. Otra forma de daño lo constituye la creación de nuevos vasos, los cuales son anormalmente frágiles pudiendo provocar hemorragias a lo interno del ojo.
¿Qué factores de riesgo existen?
El control irregular de la diabetes durante algún tiempo, presión arterial elevada, niveles elevados de colesterol, alteración en los riñones, obesidad, sedentarismo, tabaquismo y en algunos casos de Diabetes Gestacional.
¿Cuáles son los Síntomas?
En un inicio puede presentarse retinopatía y la persona puede no presentar síntomas. Es por eso que todo paciente diabético debe de hacerse examinar por un médico oftalmólogo entrenado para su detección, como ser un especialista en Retina. A medida avanza la enfermedad puede presentarse una visión borrosa de forma leve.
En estadios más avanzados, la percepción de manchas o moscas, sombras o áreas de visión perdidas y disminución de la capacidad para ver, que según el caso puede presentarse de forma súbita o gradual.
¿Cuál es el Tratamiento?
El mejor tratamiento lo constituye la prevención a través de un adecuado control del azúcar desde el inicio de la enfermedad. Una vez ya establecida y con daños que afecten o amenacen la visión puede tratarse con fotocoagulación con láser, inyecciones intravitreas y en casos más complicados, con cirugía.
El examen médico completo por parte de un oftalmólogo entrenado es la mejor forma de estar protegido y de tratar de prevenir el progreso de la enfermedad.